La Galería Prestes Maia nació en 1940, con el objetivo de unir el Valle de Anhangabaú a la Praça do Patriarca. Sin embargo, más que un pasaje subterráneo, ¡se ha consolidado como un espacio para el arte y la cultura! Con más de 6.000 metros cuadrados revestidos de mármol, la galería alberga en sus tres plantas esculturas de artistas de renombre como Victor Brecheret, lo que la convierte en un tesoro escondido en la ciudad.
Durante muchos años estuvo cerrada y abandonada. Sin embargo, tras las reformas de 2024, sus puertas volvieron a abrirse y se convirtió en uno de los rincones ocultos más curiosos para redescubrir el centro de São Paulo.
Su diseño recuerda a la arquitectura brutalista soviética, con poca ornamentación y colores sobrios. Por eso, hay quien dice que visitar la Galería Prestes Maia es como entrar en una estación de metro de Moscú.
La Galería Prestes Maia fue en su día un baluarte de la cultura paulista
Al principio, la Galería Prestes Maia era un lugar de encuentro de artistas e intelectuales. Su estilo art déco y su lujosa arquitectura la convirtieron en uno de los espacios más elegantes de la ciudad, escenario de exposiciones y actos culturales. A su inauguración asistieron el entonces presidente Getúlio Vargas y la artista modernista Anita Malfatti.
En la década de 1970, el Centro Histórico entró en un periodo de decadencia, y la Galería siguió el mismo camino. Albergó la sede de organismos públicos y luego un centro para enfermos de sida. Pero ambos cerraron sus puertas en la década de 1990, dando paso a una nueva fase de incertidumbre.
La situación mejoró entre 2000 y 2008, cuando una asociación con Masp transformó la Galería Prestes Maia en el «Masp-Centre». El local empezó a acoger exposiciones temporales y eventos, como los desfiles de la Semana de la Moda de São Paulo, que atrajeron de nuevo a los visitantes. Sin embargo, tras el fin de la colaboración, se quedó sin uso permanente y cayó en el abandono, sufriendo varios cierres y reaperturas.

¿Por qué visitar la galería?
Desde la revitalización del Valle de Anhangabaú, la Galería Prestes Maia ha adquirido un nuevo aspecto: ahora cuenta con seguridad de la Guardia Civil Metropolitana y vuelve a atraer la atención de los paulistas. Su interior alberga importantes obras, como las esculturas «Graça I» y «Graça II», de Brecheret, así como una réplica en bronce de «Moisés», de Miguel Ángel, realizada por el Liceo de Artes y Oficios.
El pasaje carece de atracciones permanentes, pero acoge esporádicamente eventos culturales y artísticos. Además, pasear por sus pasillos es un acontecimiento en sí mismo, ya que nos permite ver obras de arte de forma gratuita y explorar un lugar que en su día fue uno de los más singulares del panorama paulista.
