São Paulo siempre ha sido un importante centro migratorio en Brasil, recibiendo personas de todo el país e incluso del extranjero. Pero, por primera vez, el estado ha perdido más residentes de los que ha recibido nuevos. Así lo afirma el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), cuyos análisis muestran que actualmente hay un mayor flujo de personas que se van de São Paulo que las que se mudan aquí.
Los datos del Censo 2022, divulgados el pasado viernes (27), muestran que casi 826 mil personas dejaron el estado de São Paulo entre 2017 y 2022, mientras que cerca de 736 mil se mudaron aquí. En otras palabras, un saldo negativo de 90.000 – la primera vez que São Paulo tiene una migración negativa desde 1991, cuando el IBGE comenzó a medir este indicador.
¿Por qué se va tanta gente de São Paulo?
Una de las razones de esta nueva afluencia de emigrantes es la búsqueda de una mejor calidad de vida. Muchos habitantes de la ciudad de São Paulo y de otros grandes centros prefieren trasladarse a regiones más tranquilas, con menos tráfico y menores niveles de violencia.
Además, con el coste de la vida sube cada día en São Paulo muchas familias prefieren mudarse a ciudades más pequeñas, o incluso a las capitales de otros estados, donde pueden vivir de forma más barata.
El aumento de ofertas de trabajo a distancia también permite a muchos trabajadores mantener su empleo en São Paulo, donde el salario medio es más alto, y al mismo tiempo vivir en ciudades más baratas, lo que hace que sus ingresos sean más rentables.
¿Hacia dónde se dirigen los paulistas?
Uno de los principales destinos es Santa Catarina, que tuvo un saldo migratorio positivo de más de 350.000 personas entre 2017 y 2022. Florianópolis es una ciudad que destaca por ofrecer las infraestructuras de una metrópoli sin dejar de ser la capital más segura de Brasil.
Además, el Nordeste es una de las regiones preferidas por los emigrantes paulistas, con una gran afluencia hacia Bahía, Ceará y Pernambuco. El Centro-Oeste también se ha convertido en un punto destacado debido al fortalecimiento del agronegocio.
A pesar de todo, São Paulo sigue siendo el estado que más emigrantes recibe en Brasil. En otras palabras, los datos no indican un descenso total de la migración hacia las ciudades paulistas, sino más bien un aumento del número de personas que viajan en sentido contrario.
Sigue habiendo mucha gente del Nordeste que se instala en São Paulo, por ejemplo. Pero ahora, cada vez más gente de São Paulo se desplaza también a estados del nordeste.