El Parque Nacional da Serra da Bocaina es uno de los tesoros naturales del estado de São Paulo, con más de 1.000 kilómetros cuadrados de naturaleza intacta. Famoso por su diversidad de fauna y flora, alberga uno de los fragmentos de Mata Atlántica mejor conservados de todo Brasil y es un destino obligado para los amantes del ecoturismo.
Situado en la frontera entre São Paulo y Río de Janeiro, el parque alberga cascadas, miradores y senderos históricos que se remontan a la Fiebre del Oro. La visita garantiza no sólo una experiencia natural impresionante, ¡sino también un viaje a tiempos remotos de la historia brasileña!
Descubra los tesoros de la Sierra de Bocaina
El Parque Nacional de la Sierra de Bocaina forma parte de la Sierra del Mar y se encuentra en el municipio de São João do Barreiro en el este del estado de São Paulo. Se extiende hasta Angra dos Reis, al sur de Río de Janeiro, actuando como puente natural entre los dos estados.
Para los amantes de la aventura, el parque es un verdadero paraíso. Además de practicar senderismo por la selva autóctona, podrá bañarse en cascadas y piscinas naturales transparentes y observar una gran variedad de aves, como tucanes, pájaros carpinteros, sabuesos y halcones . Otro punto destacado es el Pico do Tira Chapéu, el punto más alto del parque, que ofrece vistas panorámicas del valle del Paraíba e incluso del océano.
Pasee por senderos históricos
El Parque Nacional da Serra da Bocaina cuenta con 33 senderos, desde los más sencillos hasta los que requieren experiencia. Pero el más emblemático de ellos es sin duda el Sendero del Oro, también conocido como Sendero de Mambucaba, ¡una ruta histórica con más de 200 años de antigüedad! Como su nombre indica, se creó durante el Ciclo del Oro y servía de ruta para el transporte del metal precioso desde Minas Gerais hasta Paraty.
El sendero aún conserva, en muchos tramos, el pavimento de «pé de moleque » construido por los esclavizados en el siglo XVIII. Son 48 kilómetros entre São João do Barreiro y Mambucaba, en la costa de Río de Janeiro, y se tarda una media de tres días. La dificultad es alta, así que hay que estar preparado.
Pero aunque el senderismo no sea lo suyo, se lo garantizamos: la Sierra de la Bocaina merece una visita. Aproveche las vacaciones de julio para hacer esta excursión?