El Parque Estatal Turístico de Alto Ribeira (PETAR) es uno de los destinos ecoturísticos más emblemáticos de São Paulo, un verdadero paraíso para los amantes de la exploración de grutas. Allí hay más de 300 atracciones subterráneas, ¡aproximadamente un tercio de todas las del estado de São Paulo! Pero entre todas ellas, destaca una: la Cueva de Tem imina, que se lleva la palma por su insólita ducha cenital.
La Gruta de Temimina es una visita obligada para quien desee adentrarse por completo en la naturaleza y explorar los tesoros únicos de PETAR . Después de todo, la «ducha natural» es una de las formaciones más raras del mundo, y no se puede ver en ningún otro lugar de Brasil.

La Cueva de Temimina es un tesoro escondido en el interior del estado de São Paulo
Muchos turistas consideran que la Cueva de Temimina, situada en el Núcleo de Caboclos, es la más bonita de PETAR. Para apreciarla, hay que afrontar un desafiante sendero de 4 horas por el bosque, con tramos empinados y resbaladizos. En otras palabras, hay que estar preparado para la aventura.
Pero el esfuerzo merece la pena, ya que permite sumergirse en uno de los entornos naturales más impresionantes de São Paulo. La ducha cae desde el techo de la gruta, formando un chaparrón natural que sorprende incluso a los guías más experimentados de PETAR.
A pesar del nombre «ducha», no es posible bañarse en la ducha de la Cueva de Temimina. La medida está pensada para proteger el patrimonio natural y evitar posibles accidentes a los turistas. Pero no se preocupe: ¡sólo las vistas ya merecen la pena!

¿Cómo surgió la ducha natural?
La «ducha natural» es en realidad una cascada dentro de la Cueva Temimina, que cae desde una abertura en el techo hasta la sala principal. Este tipo de formación es extremadamente rara y encanta incluso a los aventureros más experimentados por su belleza y exclusividad.
Es el resultado de miles de años de acción del agua sobre las rocas de la zona. El agua de lluvia se filtra a través de la tierra y poco a poco va excavando su camino bajo tierra. Con el tiempo, encuentra una brecha y cae en la sala de la cueva, formando esta hermosa cascada vertical.
Así que si quiere ver uno de los paisajes naturales más emblemáticos de São Paulo -quizá de Brasil y del mundo-, no deje de añadir la Gruta de Temimina a su itinerario PETAR. ¡Volverá con historias (y fotos) imperdibles!
