El musical «Hairspray» ha ampliado su temporada en São Paulo hasta el 3 de noviembre. Y es que, después de un estreno con entradas agotadas desde principios de septiembre, el público tiene más tiempo para dejarse encantar por la vibrante historia.
Las funciones continúan en el Teatro Renault, los jueves y viernes a las 20h, y los sábados y domingos a las 15h y 20h. Las entradas están disponibles en la web oficial y en la taquilla del teatro. No pierda la oportunidad de ver este clásico de Broadway sin salir de São Paulo.
Una celebración de la inclusión y la diversidad
Con un reparto que incluye a Tiago Abravanel, Vânia Canto, Lindsay Paulino y Aline Cunha, «Hairspray» transporta al público a la vibrante década de 1960.
La historia se desarrolla en Baltimore, donde la joven Tracy Turnblad (Vânia Canto) sueña con bailar en el famoso programa de televisión «The Corny Collins Show». A partir de entonces, desafía las normas sociales y lucha contra la discriminación racial.
Junto a amigos como Corny Collins (Ivan Parente), Link Larkin (Rodrigo Garcia) y Motormouth Maybelle (Aline Cunha), Tracy se enfrenta a los desafíos impuestos por la sociedad y por sus rivales Amber y Velma Von Tussle, madre e hija interpretadas por Verônica Goeldi y Liane Maya.
La protagonista cuenta también con el apoyo incondicional de sus padres, Wilbur y Edna Turnblad, interpretados por Lindsay Paulino y Tiago Abravanel, que aportan humor y emoción a la trama.
Hairspray: un musical que celebra la aceptación
Hairspray es más que un espectáculo musical: es un poderoso mensaje de inclusión y respeto a las diferencias. Al fin y al cabo, con una producción de primera, decorados vibrantes y coreografías atractivas, el musical pone de relieve el poder de la música y la danza para transformar la sociedad.
Por eso, el éxito del espectáculo en Brasil es un reflejo de la fuerza de la historia de Tracy y sus amigos, que demuestran que cualquiera puede marcar la diferencia. Con números musicales icónicos y una narrativa cautivadora, el espectáculo promete arrancar risas, lágrimas y calurosos aplausos del público.